Cuando te encuentras pagando dos o tres deudas simultáneamente y te sientes realmente ahogado, puede llegar a cruzar por tu cabeza la idea de refinanciar tu deuda, pero…antes de tomar una decisión, es mejor que leas este artículo hasta el final.
Qué es realmente el refinanciamiento
Refinanciar una deuda es juntar varios créditos en uno solo para darle un nuevo plazo. Dado que la naturaleza de su finalidad es reorganizar el sistema de pagos, la refinanciación puede hacerse sobre varias deudas, o sobre una que se encuentre en mora.
En ambos casos lo que hace el banco es totalizar la deuda, juntando los meses que están atrasados, y los que faltan por pagar, poniendo dicha cuantía bajo nuevas condiciones, que empiezan con un nuevo plazo e interés, esto implica que si tenías por ejemplo una deuda a doce meses y al quinto mes la refinancias todo lo que debes, más los intereses que habías acordado, vuelven a ser organizados para que comiences a pagar de nuevo.
En realidad, habrás pagado el inicio de tu deuda, con los intereses y además ahora pagarás lo que te falte con intereses sobre el total…. definitivamente por esto tendrás un sobre costo que no será bueno y el único beneficio real es la disminución de la cuota, pues el tiempo será más largo.
¿Es conveniente un refinanciamiento de tus deudas?
En realidad…. no. Si tú vas pagando tus deudas poco a poco, ya habrás avanzado con los intereses, por lo que refinanciar puede sonar muy tentador, aunque en verdad es totalmente inconveniente. En realidad, es volver a empezar una deuda en el que el más beneficiado es el banco.
Sin embargo, el refinanciamiento de una deuda puede ser conveniente para que te reorganices, pagando una cuota más baja y llegando a fin de mes con el cumplimiento de tus pagos.
¿Si debo refinanciar qué es lo más conveniente?
Quedando claro que el refinanciamiento no es lo mejor, si tienes que realizar este acuerdo, revisa cada uno de los detalles antes de aceptar. Compara los diferentes bancos, con papel y lápiz en mano constata cuál de ellos es la mejor alternativa para que los intereses sean más económicos y a menor plazo.
Refinanciar la deuda con la misma entidad es más fácil, pero en ocasiones un poco más costoso, por eso es importante comparar que opciones te ofrecen en otros lugares.
¿Cómo refinanciar tu deuda?
Debes solicitar una cita para refinanciar tu deuda
Lo primero que debes hacer es solicitar una cita para acordar el refinanciamiento de tu deuda. Al acercarte al banco debes tener muy claro cuál es el estado de tu deuda, qué pagos has hecho en lo posible con recibos y cuál es el cronograma actual, que por supuesto incluye tu cuota mensual… es muy posible que el banco tenga estos datos tal vez se pregunten alguno de ellos para confirmar.
Ten en cuenta que te van a evaluar de nuevo
Para poder aprobar una refinanciación en una deuda, el banco debe asegurarse que te encuentres en una condición adecuada para lograr pagar la cuota que van a acordar durante el plazo fijado ya que los bancos no suelen hacer este proceso constantemente.
La totalidad de la cuota fijada no puede superar el 30%, de tus ingresos totales, de tal forma que lo que vas a acordar pagar en tu nuevo arreglo debe quedar por debajo de este valor.
¿Qué pasará si te aprueban la refinanciación de tu deuda?
Una vez el banco haya realizado un nuevo cronograma de tus pagos te lo comunicará. De esta forma es posible que tu primera cuota llegue hasta 45 días después del acuerdo. Aprovecha este tiempo para formar un colchón financiero de al menos una cuota, por si en algún momento se llega a presentar un imprevisto, así no te atrasarás en el acuerdo pactado.
Tomar la decisión de refinanciar las deudas no es para nada fácil, por lo que realmente se debe realizar como último recurso después de haber agotado todas las opciones. Revisa primero que opciones tienes, si no encuentras otra, procura que las cuotas sean realmente pagables para que no tengas que volver a pasar por la misma situación, y realmente valga la pena realizar este proceso.
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